Este mes el reto del TINTERO DE ORO y el de GINEBRA BLONDE, aparte de coincidir en el tiempo también coinciden en el tema: "EL TIEMPO" así, en su más amplio sentido de la palabra. Y yo los voy a hacer coincidir en este espacio. Es que me lo han puesto a huevo para hacer un dosenuno. El primero con limitación de 250 palabras y el segundo asociado a una imagen a elegir entre una veintena aproximadamente.
Yo he elegido esta:
Podéis encontrar el resto de aportes de ambos retos en los respectivos links de más arriba.
Néfix no pudo evitarlo. Una bala perdida le reventó el pecho. Cayó a tierra mientras la vida se le escapaba a borbotones por el agujero. Luego la paz imperó. Se incorporó justo para atrapar con cariño el alma que también se escapaba por el agujero. Entonces la Mátrix en que había vivido los veintidós años de su vida comenzó a descomponerse en infinidad de granos de arena que fueron cayendo formando un desierto cubierto de cielo.
En el horizonte apareció de cintura para arriba el inmenso Hacedor.
―Te ofrezco mi alma. Creo haber sido… ―Pero el Hacedor había dejado de escucharle incluso antes de empezar a hablar.
―Aun no te toca. ―Y le indicó con un gesto que dejara el alma sobre la arena. Cualquiera desobedecía…
Entonces desierto, Néfix y su alma empezaron a descender en remolino. Cuando aparecieron por el otro lado del embudo el humano también se había disgregado. El Hacedor cogió el reloj de arena y le dio la vuelta. El alma se quedó sola en el desierto. Tras un momento apareció dentro de la Matriz de una embarazada de veintidós semanas, y por medio de ciencia infusa infectó el feto. Un instante después, los granos de arena empezaron a conformar una Mátrix exactamente igual que la que Néfix había conocido.
Algo llamó la atención del Hacedor, que se desplazó a lo largo de la infinita mesa de relojes de arena que tenía a su cuidado.
Me encanta el relato, voy a darle 7 puntos. Nefix tiene suerte.
ResponderEliminarPor lo menos tiene muchas oportunidades. Ya lo lleva en el nombre.
EliminarGracias José.
Abrazooo
Curioso que se reencarne en una matriz, mi imaginacion recorría otros pasos. Un relato magnifico. Abrazos
ResponderEliminarAunque no sé mucho del tema y no haya mucha certeza, yo diríÁ que sempre tiene que ser dentro de una matriz para poder "infectar" a alguien nuevo y desanimado.
EliminarAnrazooo
Nos dejas un relato futurista y bien guionizado, vamos guion de película. Un besote Gabi.
ResponderEliminarAhora, con los efectos especiales que hay, sí que podría representarse en una película, aunque hace u os años, hubiera sido más difícil.
EliminarGracias Campi
Abrazooo
Un buen relato , ¿circular?
ResponderEliminarAludía más a ña reencarnación, que es más bien una espiral cónica ( como la de "el vici solitari", pero teniendo en cuenta que Nefix es un anagrama, y lo que apunta j.a.garcia, sí que ha quedado más bien circular.
EliminarAbrazooo
Un poco descorazonador. Un beso
ResponderEliminarTambién podría enfocarse de modo que Matrix fuera la realidad arenosa, o que las dos realidades fueran reales, y que realmente hubiera una transformación material. O que las dos realidades fueran Matrrixes diferentes; bueno eso sería más descorazonador aun😜.
EliminarAbrazoo
Qué estrés el del Hacedor...
ResponderEliminarNo le envidio.
Seguramente ha puesto Él las normas así wue... Si llega un día en que nadie muera en sábado y domingo, ya sabrás la causa.
EliminarAbrazooo
Una curiosa reencarnación. Estupendo relato! Saludos.
ResponderEliminarlady_p
Yp creo que si funciona realmente, ña reencarnación no puede ocurrir de otra forma, , o quizás me faltan datos, tampoco sé mucho del tema.
EliminarAbrszooo
Hola Gabi!
ResponderEliminarTu relato me ha parecido sencillamente genial! Muy épico y poético al mismo tiempo! Sobretodo si lo lees con la música de fondo que nos propone Ginebra Blonde en su blog! Pone los pelos de punta y emociona porque lo describes tan bien que lo imaginas, como una escena de una película! Me ha encantado! Un besote amigo!
Muchas gracias, amiga.
EliminarYa sabes que mis relatos son sinoloveonolocreo. Hay que ilustrar bien las cosas para que resulten creibles😜.
Besazooo
muy interesante si señor.
ResponderEliminarSalud.
Si, pero hasta que no lo analice bien un comité de expertos y dé su visto bueno, no sabremos si responde ala realidad o no.
EliminarAbrazooo, Erik
Ingenio, e imaginación. Muy bueno ese Hacedor vigilante de relojes de arena que habitamos. Un cambio en un feto, y hale, a la mierda el invento :-)
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, amigo
Bueno... no a la mierda... es un invento nuevo.
EliminarBesosss Amiga
Ya me apetecía a mí volver a disfrutar de la agudeza de tus relatos…
ResponderEliminarY ¿quién sabe?... Lo relatas de tal manera que, además de ser fantásticamente visual, bien podría caber como posibilidad en un mundo que, a pesar de todo lo que ya sabemos, es un verdadero misterio. Algún Hacedor tiene que haber moviendo los hilos, para que tantos sinsentidos cojan algún sentido.
Magnífico, querido amigo.
Muchísimas gracias por participar.
(Recuerda mandármelo por correo, para poder publicarlo en el blog de autores a fin de mes)
Un abrazo grande 💙
Magnífico! No desilusionas de una vez a otra. Al contrario, el nivel es en ascenso. Un gran abrazo
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarLos relojes de arena son la materailización del eterno retorno.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Un hacedor dueño del tiempo que se escurre una y otra vez entre los granos de arena de los relojes. Me encantó. Un abrazo
ResponderEliminarUn relato de lo más ingenioso y fantástico.
ResponderEliminarMereces el premio a la creatividad.
Cariños y buen comienzo de esta semana de mayo.
Kasioles
Estupendo Gabiliante. Un micro lleno de melancolía en torno a la reencarnación y el tiempo concedido a cada vida. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarGreat blog
ResponderEliminarPlease read my post
ResponderEliminarInteresante aporte. Da para pensar en el significado de nuestra existencia. Me gustaron las imágenes que logras convocar con tus palabras. Saludos.
ResponderEliminarHola:
ResponderEliminarMe ha gustado mucho: muy inesperado el desenlace.
Saludos cordiales.
Qué buena tu aportación. Encima, matando dos retos de un tiro.
ResponderEliminarUn abrazo.
El tiempo no es sino el espacio entre nuestros recuerdos (imprevistos). Saludos don Gabi.
ResponderEliminarHola, Gabiliante, un micro genial que da mucho juego. La muerte súbita o inesperada cercena una vida de apenas veintidós años, al parecer no era su hora y con rapidez toma forma humana dentro de una embarazada coincidencialmente de veintidós semanas, se repite en su historia ese número y algo sucede que el Hacedor se extraña al ver el reloj de arena que conforma la nueva vida de Néfix, que al parecer es idéntica a la que acaba de abandonar. Supongo que este al igual que el Fénix (buen recurso del intercambio de letras en el nombre) resurge de sus cenizas. Quizás los otros relojes se ven afectados por su reencarnación, que viene a ser una resurrección y a lo mejor se detuvieron...
ResponderEliminarBueno, así lo entendí Gabi, y me encantó ese juego cómplice de dos retos. Un abrazo.
A esto llamo yo una profunda nítida evocación de lo insondable. Bien hecho, Gabiliante. Lo creas o no.
ResponderEliminarNo sé por qué Blogger persiste en desaparecer mis comentarios...
ResponderEliminarHola Gabiliante. Toda una metáfora del renacer, de una reencarnación que acontece una y otra vez sin que podamos detenerla. Tal vez sea eso lo que nos depara la muerte, tal vez la vida sea un camino de aprendizaje que terminará con el conocimiento. Un abrazo.
ResponderEliminarQué habrá de cierto en lo que algunas personas hayan o hayamos (quién sabe) vivido otras vidas antes que la actual?
ResponderEliminarCambiar veintidós años por veintidós semanas, es un buen trueque, ¿no?, entonces, ¿hay una pequeña esperanza de eternidad de espíritu?.
ResponderEliminarMe gustó mucho tu micro, Gabiliante
¡Hola, Gabiliante! Un micro que, visualmente, es muy potente, además de especulativo. Creas una cosmología en la que cada ser vivo tiene su propia realidad y, la muerte, no es más que un tránsito a otra realidad y otro universo. Con ello, además, creo que resuelves el problema de la reencarnación, y es que si, cada año somos más, ¿de dónde salen? Un abrazo!!
ResponderEliminarLos relojes de arena, que alguna otra vez han salido en tus relatos, son una buena metáfora de la vida. Besos
ResponderEliminarHola Gabiliante la verdad es que el relato esta muy bien escrito y como han dicho es mu potente visualmente. La rencarnación pero al servicio del hacedor que sin duda no se aburre. Un abrazo.
ResponderEliminarExcelente relato. Mucha suerte, un abrazo.
ResponderEliminarHasta se me hizo corto... Me ha gustado ver en el relato un lazo entre la Matrix y la vida o; no muerte. Cabe la posibilidad de que su Alma al regresar tan rápido se vio en similar escenario al que había dejado. Aquí el Hacedor no se lo pensó mucho para regresarlo...
ResponderEliminarUn abrazo.
A mí este tipo de relatos que haces, cuando te pones filosófico, me subyugan. Más aun si le añades este toque mágico, extraño, salido de no se sabe qué universo imaginativo donde las almas se deslizan por relojes de arena y su matriz fundamental queda expuesta como un desierto de granos bajo el cielo (¡¡esa idea maravillosa es pura poesía!!).
ResponderEliminarCreo que ha habido algún fallo, se ha encarnado en una matrix idéntica a la que ya tenía. A ver si el hombre quiere repetir su propia vida... o volver al pasado... Es una historia llena de significados, preciosa, sugerente, cautivadora. El Hacedor va a ver la anomalía... ¿qué hará? Has jugado con la idea de Mátrix, en la que el protagonista es la anomalía que romperá el sistema.
Hemos coincidido, sí qué curioso... pero tu micro es infinitamente mejor.
¡Felicidades y un abrazo, Gabi!
¡Me encanta! La vida gestionada desde relojes de arena. El tiempo y el Hacedor custodiando los destinos. Parece que la bala perdida no consiguió hacerle morir del todo. Mátrix vuelve a regenerarse y el alma busca un nuevo renacer. Habrán de parirle de nuevo, volverá a nacer para volver a morir.
ResponderEliminarMuy bueno. Tu imaginación no tiene límites 👏🏼👏🏼👏🏼
Realmente me gusta mucho el enfoque que le diste a tu micro, muy bien pensado, analizado, escrito y encima para participar en dos desafíos, no me queda más que felicitarte, disfrute de su lectura y me ha hecho pensar, meditar la situación.
ResponderEliminarUn abrazo Gabiliante, te felicito nuevamente.
PATRICIA F.
Una visión abstracta del tiempo. Bien.
ResponderEliminarEl tiempo y los relojes de arena del gran hacedor. Una reencarnación del ser muerto, que renace de nuevo en un ciclo sin fin.
ResponderEliminarBuena manera de relatarnos esa magnitud física con la que se mide la duración o separación de acontecimientos vitales.
Abrazo.
Estupenda historia sobre la reencarnación y un tiempo que no tiene fin, tan infinito como la vida. Me ha gustado mucho, Gabiliante. Un abrazo!
ResponderEliminarTú sí que eres un gran hacedor de historias, Gabiliante, a cada cual más imaginativa y pintoresca. Aquí nos invitas a la reflexión como si de una parábola o leyenda se tratase, uniendo fantasía, religión con mito. Me ha encantado, compañero.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo!
Que buena historia!!!! De alguna manera estoy convencida que todo aquello que nos baja de la imaginación, no es tan irreal, algo de este reloj de arena y sus protagonistas marcan algún rumbo desde un embudo donde lo fino decide a que lado vas a subir o bajar.
ResponderEliminarUn abrazo Gaby y linda semana :)