Esta semana nos convoca Inma en su blog MOLI DEL CANYER para tratar el tema de "envejecer".
Esto no va exactamente sobre envejecer, pero casi.
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―¡Me das asco! ¡Apestas a viejo! ―Al chico le pareció que ella quería insinuar que él no le interesaba. Aparte de eso, el resto eran florituras hiperbólicas. No obstante, le chocó lo de “viejo”. Quizás, si solo era una cuestión olfativa, la situación podía tener remedio.
La verdad es que él le llevaba a ella, la friolera de veinticuatro meses. Él tenía treinta y un años, y ella veintinueve. Preguntó a algunos amigos, así como quien no quiere la cosa y no inmediatamente después de ducharse, si les parecía que oliese a viejo, y todos le respondieron que no. No obstante todos los entrevistados eran mayores que él. Estimó que la muestra no era representativa , y decidió investigar por internet. Primero buscó “olor a viejo”, pero solo hablaban de libros y casas. Luego busco “olor a anciano”; y ahí sí. Los japoneses, la única cultura que aún respeta a los ancianos, descubrieron en 2001 el “kareishu”, químicamente en lenguaje occidental el 2-nonenal, una molécula que… bla…bla….bla… olor que no se va fácilmente ni siquiera con la ducha… bla…bla…bla.. soluble en la grasa de la piel… bla…bla…bla… antioxidantes… bla…bla…bla… ¡¡se genera a partir de los treinta años!!…
«¡¡Ahí está!! ¡Por fin! ¡Ahora todo encaja! ¡Solo es una cuestión olfativa! Aquello que dijo no era porque no le gustara», pensó en voz alta. En realidad solo hay jóvenes y viejos. La segunda juventud, la madurez, el desarrollo, la adultez… todo paliativos y eufemismos de “viejo en la parte alta de la campana de Gauss”, que si bien desciende en una curva menos empinada que la que asciende, en definitiva, desciende.
Soluciones. Debía encontrar soluciones. Se combate simplemente con jabón. Jabón de caqui, persimón lo llaman por ahí, que solo se fabrica en Japón en los laboratorios de las empresas más punteras de cosmética. Pedirlo allá era posible, pero farragoso.
Solución: Veintinueve y uno, treinta. El año que viene volvería a tirarle la caña a la vieja esa.