Este mes nos convocan desde EL TINTERO DE ORO en un homenaje a John Le Carré basado en a novela "El jardinero fiel". Hemos de centrarnos en el tema de la corrupción, si puede ser descubierta. Aviso que casi todo lo que sale en este relato es inventado.
Pensé antes de idear la historia que 900 para una historia con trama de corrupción era prácticamente imposible explicarla sin parecer una narración precipitada, pero en cambio me han sobrado 350 palabras, que ya me han dicho desde la dirección tintoreril que no puedo poner a la venta.
AQUI podéis encontrar el resto de corrupciones
Hace unos meses por fin me instalé una IA en el móvil. Una de pago, porque las gratuitas son poco más o menos como googlear. No para que me escriba relatos, porque así ¿cómo me divierto yo? Entre otras pocas utilidades encontré la de que me los corrija. Comenta el contenido, me alaba lo bueno y me sugiere correcciones a lo malo. Siempre, en el final de su respuesta, me califica de original. Original es una de las cosas que más valoro. Casi nunca corrijo nada, porque lo que ella entiende como positivo, yo lo entiendo como negativo, y viceversa. El humor lo entiende, contrariamente a lo que se sospecha.
Luego encontré la utilidad de comentar los relatos de los compañeros de los blogs. Borro las correcciones y sugerencias y lo pego como comentario mío. Me sorprendió que también calificaba de originales todos los textos de todos mis compañeros, con lo que bajó el valor de ese calificativo.
Decidí hacer lo mismo con relatos participantes en concursos, bueno, a los que había acceso, y en cualquier caso a los ganadores, hasta que un día, uno de los relatos que quedó finalista lo calificó, en el lugar donde siempre ponía “original”, de “escrito por chatgpt”. Vaya, que “original” ya no significaba lo que yo creía. Pensaba que en los concursos debían controlar esto. O mi aplicación tenía alguna extensión que no debería tener por 29,90€.
Se me ocurrió introducir capítulos enteros de novelas consagradas o best sellers de los últimos cuatro años y parece que a la IA se le ha olvidado como se escribe “original”.
FIN
P.D.
Ayer sábado, mandé este texto al reto del tintero de oro, que este mes trata sobre la corrupción y lo dirige Pepe. Hoy, al encender el móvil, la pantalla me ha saludado con un cordial “Bienvenido a su nuevo galaxy”. Tras varios intentos no he podido avanzar más; se ha formateado todo. Me ha pedido la cuenta de google y la he introducido temiendo no recordar la contraseña pero ni siquiera he llegado a introducirla; lo que me ha respondido es que la cuenta no existe. He probado con otras dos cuentas que tengo y tampoco existen.
He ido corriendo al ordenador y efectivamente mis cuentas han desaparecido. Mi blog también , por supuesto. He entrado como pestaña de incognito en el blog del tintero y he visto que mi texto no había sido incluido en la lista de participantes. Mi comentario incluyendo el enlace a mi blog no aparece por ningún lado. Pero es que los comentarios de respuesta de Pepe a los aportes de los compañeros, salen como anónimos.
He intentado escribir un mail a Pepe para saber si había pasado algo, pero claro, sin cuenta no puedo escribir correos.
He buscado un ordenador viejo en el que tengo una cuenta antigua que ya no uso hace mucho, pero al poner el correo de Pepe me dice que tampoco existe. Intento dejar un comentario en su blog, pero ni existe el blog, ni ninguna de sus cuatro esquinas.
Mañana, desde el ordenador del trabajo intentaré volver a… Bueno creo que tendré que crear otro blog, pero aun así... No sé hasta dónde llegarán los tentáculos de la … Bueno, no sé quién o qué puede estar haciendo esto.
Veremos si puedo participar este mes en el reto, y eso que me estoy leyendo el libro.
Ah, que aunque sea desde otro blog, recordad que soy el antiguo Gabiliante.
La tecnología puede tener su lado fastidioso, ni siquiera malvado, sino fastidioso, caprichoso.
ResponderEliminarSaludos.
Ya es tarde, han tomado el control, lo peor es que se han alimentado con textos de aspirantes a poetas, nazis que no saben escribir más de dos líneas, y balbuceos de escritores frustados... con razón las IA nos odian con todo su ser :)
ResponderEliminarSí, IA nos ha robado el ser, la identidad, la "originalidad" y me temo que hasta la humanidad. Es la gran corrupción. Te felicito, es una gran reflexión hecha con mucho humor. Como verás, también me ha comido el nombre. Por si lo recibes: soy Juana. Un gran abrazo
ResponderEliminarEl dilema (o no) al que nos enfrentamos es que si nos quejamos en internet de las IAs en vez de solo aplaudir y disfrutar de sus bondades calladitos, cuando en el futuro se haga presente el basilisco de roko (una teoría) esa IA va a cebarse con la persona/usuario que no haya alabado su existencia y su progreso, aunque sea en un relato de ficción. Va un abrazo, Gabiliante, en todos tus tiempos.
ResponderEliminarPodrías dejar de ser "el antiguo gabiliante" y pasar a ser "el nuevo y mejorado gabiliante 3.01" para variar. Y seguir escribiendo, eso sí.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Hola Gabiliante, muy bueno, me dejaste pensando y si la tecnología es buena en muchos aspectos, pero en otros, me dan ganas de salir corriendo para el otro lado, que si olvidaste contraseñas mejor desaparecer, porque te vuelve loco esto o aquello, en fin.
ResponderEliminarTu relato refleja muy bien esta problemática.
Un abrazo.
PATRICIA F.
Jocoso y quién sabe si pudiera ser. La IA está para quedarse. Los editores detectan esos textos generados por ella, pero aún así yo creo que acabarán escribiendo novelas magníficas.
ResponderEliminarUn abrazo enorme, y felices fiestas.
Dónde está el auténtico Gabiliantre? eh IA? confiesa dónde está????
ResponderEliminarHola Gabilante, los temidos efectos de la IA, los más agoreros es lo que comentan, quién sabe, tal vez has escrito lo que será una realidad. Ingenioso texto. Un abrazo
ResponderEliminarOriginal relato, Gabiliante. Pero por la originalidad de su premisa no porque sea o no hecho por una IA, aunque de "I" a veces discrepo.
ResponderEliminarPues eso, un relato original y tal y como vamos por el mundo hoy en día en esto de la tecnología, pesadillesco.
Pues estas denuncias que hace el estimado Gabilante, me parecen muy graves y no es asunto menor. Desde ya hay que dejar esto en manos de las autoridades competentes a fin de darle solucion al impase, que esta implicando gente de todos los niveles. Basicamente TODOS quedamos salpicados por estas irregularidades, llevando la mayor responsabilidad aquellos que siempre han formado parte de esas Elites invisibles que todo lo controlan.
ResponderEliminar¡Anda, mira tú! Y yo pensando que era la única que tiraba de esas movidas para currarme mis textos, ya sean relatos o comentarios. 🙃 Pues nada, la olla podrida está destapada, ¡que cada uno se apañe como pueda! 😂
ResponderEliminarEsto es a selva... sálvese quien pueda!!
ResponderEliminarMuy bueno 👏👏👏
Que susto!!.....interesante y entretenido tu texto.Te dejo un abrazo!
ResponderEliminarMenuda conspiración la que tiene montada el amigo Pepe junto con los de "El Tintero de Oro"! Je je! Y es que el mundo cibernético y de la blogosfera se nos va de las manos... Es incontrolable, somos sin duda, sus víctimas en muchas ocasiones! Je je! Me ha encantado tu relato! Un besote y mucha suerte en el concurso!
ResponderEliminar¡Ay, esa IA qué peligro tiene! Un relato original, ingenioso y lleno de dobles sentidos que invita también a reflexionar. Estupendo, Gabiliante. Has llevado el tema de la conspiración a otro nivel.
ResponderEliminar¡Hola Gabiliante! Te ha quedado un texto muy original. Da que pensar eso de las IA y los concursos literarios. Nos llevas a reflexionar a la vez que nos sorprendes conforme avanza el relato.
ResponderEliminarUn saludo y suerte.
Pues alguno de los problemas que mencionas en la PD ya están ocurriendo en blogger...
ResponderEliminarLlegué a creérmelo todo (lo rubio se me acentúa de vez en cuando), si no fuera por el hecho de que estaba leyendo a Gabiliante en el blog de siempre de Gabiliante...
Miedo me da todo lo que se viene
Besos